2 Timoteo 3: 13-15 (Biblia de las Américas-LBLA)

¹³ Pero los hombres malos e impostores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados.

¹⁴ Tú, sin embargo, persiste en las cosas que has aprendido y de las cuales te convenciste, sabiendo de quiénes las has aprendido;

¹⁵ y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden dar la sabiduría que lleva a la salvación mediante la fe en Cristo Jesús.

Reflexión: Al leer este texto en la Biblia, sobre el carácter de los hombres en los últimos días antes del fin de este mundo en que vivimos, nos debe ayudar a despertar sobre la crianza que le estamos dando a nuestros hijos, pues dice que los hombres malos irán de mal en peor, engañando y siendo engañados, y eso no lo podemos negar en el tiempo en que vivimos, vemos como el mundo parece preocupado por cosas tan triviales y superficiales, que ya nos insensibilizamos al ver un niño adolescente suicidarse por alguna situación que lo agobiaba; pero cómo es posible que nuestros niños al tratar de mantener una charla con ellos, pueden llegar a decirte “estoy aburrido”, “no sé qué hacer”, “ mi mamá no me comprende”, “estoy harto de lo mismo, todos los días”, expresiones como estas nos dejan sin aliento, entonces pensamos, eres tan niño y no te veo vida y alegría, se necesita una esperanza, pero si lo único que ellos hacen es ver demasiada televisión y video juegos, entonces se aíslan, el padre preocupado trata de buscar métodos humanos para aplacar el aburrimiento o la desesperanza de sus hijos, y se pregunta ¿ a dónde puede llegar todo esto ?. Pero en la cita guía, vemos como Timoteo desde su niñez había sido lleno de la sabiduría que dan las Escrituras, y ahora son confirmadas por medio de nuestro Salvador, Jesucristo.

Los hogares es el lugar donde debe ser fortalecida la enseñanza de las Escrituras para nuestros hijos por medio de los padres, pero cómo ha de hacer un padre o una madre, si no tiene ánimo de leer las Escrituras y orar; cómo puedo decirle a sus hijos que la palabra de Dios nos da descanso por medio de su Espíritu, si no lo está viviendo, entonces debemos ser quebrantados a un profundo anhelo en nuestro corazón de leer las Escrituras, predicarla y vivirla; no es un llamado fácil, demanda tiempo, quebranto, lagrimas y sufrimiento, pero lo más importante es que el Señor te sustentará en este proceso que puede demorar meses, o quizás años, por la oración en el Espíritu Santo.

Si como padre o madre te sientes vacío, no te desanimes, sigue adelante y esperando en el Señor, por medio del poder de su Santo Espíritu, arrepiéntete de corazón a Dios, y ora con tu cónyuge y tus hijos, aunque no tengas ganas, hazlo, y en el proceso Dios te dará de su gran amor y compasión por creer en Él.

Piensa en estas citas que a continuación mencionaré, que nos ilustran la responsabilidad que tienen los padres cristianos ante Dios, de enseñarles a nuestros hijos la palabra de Dios, con gozo y apasionados por anunciar el evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Por último, si te sientes que no puedes seguir con todo esto, ese es el momento que Dios, dice “lo que es imposible para el hombre es posible para Dios”, no pierdas de vista que la salvación es el don de Dios, y nosotros somos sus siervos, que anunciamos la verdad de la buena nueva de salvación.

Deuteronomio 6:5-9

6:5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6:6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 6:7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 6:8 Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; 6:9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas. 

Éxodo 10: 1-2

10:1 Jehová dijo a Moisés: Entra a la presencia de Faraón; porque yo he endurecido su corazón, y el corazón de sus siervos, para mostrar entre ellos estas mis señales, 10:2 y para que cuentes a tus hijos y a tus nietos las cosas que yo hice en Egipto, y mis señales que hice entre ellos; para que sepáis que yo soy Jehová. 

Proverbios 4: 1-5

4:1Oíd, hijos, la enseñanza de un padre, Y estad atentos, para que conozcáis cordura.4:2 Porque os doy buena enseñanza; No desamparéis mi ley. 4:3 Porque yo también fui hijo de mi padre,Delicado y único delante de mi madre. 4:4 Y él me enseñaba, y me decía:Retenga tu corazón mis razones, Guarda mis mandamientos, y vivirás.4:5 Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; No te olvides ni te apartes de las razones de mi boca;

Proverbios 22:6

22:6 Instruye al niño en su camino, 
Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él

Efesios 6:1-4

6:1 Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo.6:2 Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; 6:3 para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.6:4 Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.

Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes.

Consejo Útil: Lee el libro de Rut